Mercy Yacelga es docente y el mayor reto, desde la llegada de la pandemia, ha sido motivar a sus estudiantes, y las familias que los acompañan, a que no dejen de estudiar a pesar de las limitaciones. Ella no ha dejado de visitarlos y hasta buscarles en sus casas para motivarles. En esta aventura de enseñar, incluso encontró un caso que le marcó y le dio una lección de vida.