Kathy Estrada es docente en la ciudad de Manta. Cabeza de su hogar, el motor de su vida son sus hijos. Con la llegada de la pandemia se le hizo difícil dividir sus dos funciones, pero eso no la detuvo para sacarlos adelante. Sus problemas de aprendizaje en el hogar la han ayudado a tener nuevos conocimientos para aplicar con sus alumnos, sin importar si tienen una discapacidad o no.